COMPETENCIAS CIUDADANAS, SEMANA 36

 Momento de desarrollo o estructuración: ¡Lo que estoy aprendiendo!

 60 minutos

Actividad 7 – competencias ciudadanas

Para esta actividad vamos a colocar mucha atención al cuento.

EL CONEJO BERMEJO

Había una vez un conejo que tenía 6 años. Se llamaba Bermejo. El conejo Bermejo era muy simpático y tenía muchos amigos en su clase. Pero había una cosa que no hacia bien.

Cuando la Señorita Doña coneja explicaba cómo se hacía una ficha, el conejo Bermejo nunca la escuchaba empezaba a mirar para todas partes y se ponía hablar con otro conejito que tenía al lado, ¿Y sabéis lo que pasaba?

Que ni el conejito Bermejo ni el otro compañero se enteraban de cómo se hacia la tarea y luego tenían que repetir la ficha para hacerla bien, mientras los otros conejos ya podían ponerse a jugar. Eso también le pasaba cuando la ¨profe¨ contaba un cuento.

Bermejo tampoco escuchaba a sus compañeros cuando contaban sus aventuras en la asamblea. Los conejitos estaban tristes con que Bermejo no para de estar inquieto. Un día, Bermejo fue con sus  papás al zoológico donde vio muchos animales y se la paso muy bien. Al día siguiente, Bermejo quería contar a la señorita Doña coneja y a los demás conejitos su aventura en el zoológico.

Entonces la señorita coloco a todos los conejitos en el borde de la alfombra, ya todos ubicados Bermejo comenzó hablar... Pero los demás conejitos no le ponían atención y Bermejo empezó a enfadarse y a decir: - ¡Eh! ¡Silencio! ¡Escúchenme!

Pero ni caso le hacían, Bermejo casi llorando le dijo a su profe:

¡Señorita! No me escuchan y no puedo contar mi aventura en el zoológico.

Entonces una conejita alzo la mano y dijo.

Señorita no queremos escucharlo, porque cuando usted explica, Bermejo  no la escucha y charla con los demás, además cuando nosotros queremos contar algo tampoco nos escucha así que ahora nosotros no queremos escucharlo a él.

Bermejo se puso muy triste  porque se dio cuenta que tenían razón: el nunca escuchaba y si alguien estaba hablando él se ponía a charlar. Ahora comprendió como se sentían los demás cuando el charlaba mientras ellos hablaban.

Se fue a su casa muy triste y su mamá le dijo: ¿Qué te pasa Bermejo?

Bermejo se lo conto todo a su mamá.

La mamá le dijo que si el no escuchaba y molestaba, los demás ahora no querían escucharlo a él.

Su madre le enseño un truco:

A partir de ahora, cuando alguien cuente una cosa o tenga la  palabra para hablar, lo miras a los ojos, lo vas a escuchar y no vas a charlar con nadie.

Si alguien te quiere hablar tú le haces (gesto de silencio)   y sigues escuchando. ¿Entendido?

Al día siguiente en la clase se puso a escuchar a la señorita, también a sus compañeros. Si algún conejito hablaba el (hacia el gesto del silencio). Todos los días hacia el truco que le había enseñado su mamá, así se enteraba de cómo realizar las fichas y todo lo que enseñaba su profe.

De esta manera Bermejo estaba contento, porque ya sus compañeros los conejitos lo escuchaban también a él. Y colorín colorado, el cuento de Bermejo ha terminado.

FIN

Actividad 8– ética

Vamos a dibujar la historia con todos sus personajes y luego debes escribir que enseñanza te dejo en tu vida que te puede  ayudar para el buen funcionamiento de las normas y los valores en tu comunidad y en tu institución educativa.

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